Parlamento británico votará si abandona la Unión Europea sin acuerdo

Reino Unido podría abandonar la UE el 29 de marzo de 2019

El Parlamento británico votará el 13 de marzo de 2019 si aprueba abandonar la Unión Europea (UE) sin un acuerdo, luego que el Legislativo rechazó por segunda vez el convenio negociado y revisado por la primera ministra Theresa May con el bloque para la separación del Reino Unido.

Si se llega a aprobar la opción de una salida sin acuerdo, Reino Unido abandonaría la Unión Europea el 29 de marzo de 2019, como está programado, sin compromisos que rijan las relaciones entre Londres y Bruselas.

De rechazar esta forma de rompimiento, el Parlamento deberá hacer otra votación en la que los legisladores británicos tendrán que decidir si solicitan a la Unión Europea una prórroga al artículo 50, que establece el 29 de marzo de 2019 como la fecha para la salida de Reino Unido.

Además, el acuerdo negociado para la salida de Reino Unido de la UE fue rechazado por 391 votos contra 242, una decisión que la primera ministra lamentó, mientras el líder opositor laborista, Jeremy Corbyn, consideró que May debería convocar a elecciones.

"Este estancamiento solo puede ser resuelto en Reino Unido. Nuestros preparativos para un escenario sin acuerdo son ahora más importantes que nunca", aseveró por su parte el jefe negociador de la Unión Europea para el Brexit, Michel Barnier.

Asimismo, el principal motivo del rechazo al acuerdo negociado por May, y revisado a última hora el lunes 11 de marzo de 2019, es la situación en la frontera entre la República de Irlanda y el territorio británico de Irlanda del Norte, que tras el Brexit sería el único límite terrestre entre Reino Unido y la UE, apuntó la cadena BBC.

Bajo el convenio negociado por la primera ministra, se establecería un periodo de transición de 21 meses en el que funcionaría un acuerdo de libre comercio entre Londres y Bruselas, por lo que Irlanda del Norte continuaría dentro del mercado común y la unión aduanera de la UE.

Los opositores a esta propuesta argumentan que Reino Unido quedaría sujeto de forma indefinida a la UE como resultado de esta previsión, llamada salvaguarda irlandesa, aunque Theresa May logró un compromiso vinculante con el bloque para poder demandar este punto en cualquier momento. Una propuesta anterior ya había sido rechazada por los parlamentarios en el debate del 15 de enero de 2019, por 432 votos en contra y 202 a favor.

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