Google suscribe compromiso de la Unión Europea para borrar huella de carbono en 2050

Financiarán con 10 millones de euros a desarrollos tecnológicos que impulsen la sustentabilidad ecológica

Tras anunciar su compromiso con eliminar el total de sus emisiones de carbono para 2030, la empresa Google suscribió la iniciativa de la Unión Europea de convertir a la región en el primer continente con huella de carbono cero en el mundo para 2050. Esto, a través de un comunicado que refirió lo dicho por el CEO de Google y Alphabet, Sundar Pichai, el 16 de septiembre de 2020 durante el festival GreenTech, celebrado en Berlín, Alemania.

Durante su presentación, Pichai adelantó tres acciones específicas con miras a impulsar el desarrollo sustentable en Europa. Primeramente, la empresa destinará 2 mil millones de euros para inversiones en proyectos de generación de energía limpia e infraestructura verde, con los que además esperan generar 2 mil nuevos empleos.

La segunda acción consiste en el intercambio de tecnologías y expertise en la región, así como el impulso al desarrollo de inteligencia artificial y aprendizaje de máquina. Estas tecnologías estarían orientadas a hacer más eficiente el consumo de energía en inmuebles de uso comercial e industrial, pues la gran G asegura que gracias a su IA, han logrado reducir el consumo de energía de sus centros de datos en un 30%.

Finalmente, financiarán con 10 millones de euros a organizaciones y startups tecnológicas por medio del Google.org Impact Challenge, convocatoria destinada a impulsar la innovación tecnológica con miras al "progreso de Europa hacia un futuro más ecológico y resiliente". Proyectos tecnológicos relacionados a energías renovable, la descarbonización de la industria, calidad del aire, planeación y protección de recursos naturales son elegibles para recibir hasta 2 millones de euros y asesoría personalizada por parte del Google for Startups Accelerator.

El compromiso al que Google se suscribe fue propuesto por la comisión europea el pasado 4 de marzo de 2020 y consiste en un instrumento legal diseñado con miras a "darle dirección a nuestra estrategia de crecimiento sostenible y garantiza que la transición será gradual y justa. Es el corazón del Tratado Verde europeo. Ofrece predictabilidad y transparencia para la industria europea y sus inversionistas" afirmó Ursula von der Leyen, presidenta de la Unión Europea, en un comunicado.

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