Occidente impone fuertes aranceles a los vehículos eléctricos chinos

Ciudad de México, 20-09-2024 |

Entre los aranceles y las denuncias, Occidente y China escalan máximos niveles de tensión

Las principales economías occidentales apuntan contra un enemigo común en la creciente exportación de vehículos eléctricos de China. Ante lo que consideran "prácticas comerciales desleales", Estados Unidos, la Unión Europea y Canadá implementan restricciones comerciales severas aumentando los aranceles a las importaciones de vehículos eléctricos provenientes del gigante asiático.

En mayo de 2024, Estados Unidos elevó sus gravámenesdel 25% al 100% sobre los vehículos eléctricos chinos. Poco después, en julio, laUnión Europea impuso un arancel antisubvenciones provisionalde hasta el 37,6%, argumentando que los productos chinos se venden a precios excesivamente bajos, lo que perjudica la industria local. Por su parte, Canadásiguió la misma línea y también aumentó los aranceles al 100%. La Comisión Europea investiga actualmente las exportaciones chinas por su impacto en el mercado local, una situación que afecta no solo a Europa, sino a varios países.

Ante estas medidas, China reaccionó con firmeza. Como respuesta al arancel antisubvenciones de la Unión Europea, China impuso una tasa de dumping similar a los vehículos eléctricos europeos. Además, presentó una queja ante la Organización Mundial del Comercio (OMC) en contra de los aranceles de la UE. La reacción china fue especialmente severa con Canadá, con la apertura deinvestigaciones antidumping sobre el aceite de canola y productos químicos canadienses, en un esfuerzo por contrarrestar las restricciones comerciales impuestas.

Según el Foro Económico Mundial (WEF), esta escalada de aranceles y contramedidas está intensificando las tensiones comerciales en un entorno ya marcado por las fricciones geopolíticas. China, bajo el pretexto de avanzar hacia una economía verde, busca consolidar su posición como líder mundial en la producción de vehículos eléctricos. Desde 2017, las exportaciones de vehículos eléctricos del país asiático creció un 13.300%, alcanzando los 42 mil millones de dólares en 2023, lo que representa cerca del 70% de la producción mundial de este tipo de vehículos.

Si bien las preocupaciones delos países occidentales sobre la influencia china en el mercado global de vehículos eléctricos pueden ser legítimas,también implementaron políticas similaresde subsidios estatales para fortalecer sus industrias. Un ejemplo claro es la Ley de Reducción de la Inflación de Estados Unidos, así como programas de ayuda estatal en varios países europeos. Esta situación evidencia que las tensiones actuales son parte de una competencia global por el liderazgo en sectores estratégicos como la tecnología y la producción de vehículos eléctricos.

El WEF advirtió que los aranceles impuestos por Estados Unidos, la Unión Europea y Canadá probablemente no obligarán a China a cambiar sus políticas industriales. En lugar de ceder, China mantiene una postura firme y está diversificando sus exportaciones hacia mercados emergentes, como Australia, para mitigar el impacto de los aranceles. Además, muchos fabricantes chinos comenzaron a trasladar su producción a terceros países para esquivar las barreras comerciales.

Aunque los países occidentales optaron por recurrir a la OMC para resolver algunos de estos conflictos, el WEF considera que este enfoque no soluciona las tensiones de fondo. Las acciones unilaterales y proteccionistas suelen perpetuar el ciclo de represalias, dificultando la resolución a largo plazo. Según el WEF, la única solución sostenible pasa por una cooperación multilateral, donde se establezcan nuevas reglas de competencia global que reemplacen las actuales políticas proteccionistas. Sin embargo, para que esto suceda, las naciones involucradas deberán recurrir a la diplomacia y abandonar las tácticas unilaterales que han dominado hasta ahora.