Contagiarse una enfermedad en vuelos comerciales

Las enfermedades por vía aérea son más probables

El contagio de enfermedades en vuelos es tema debatido por pasajeros frecuentes, en especial, en el ámbito de las empresas. Muchos ejecutivos de negocios toman vuelos comerciales varias veces al mes y se trasladan a ciudades, a veces en diferentes continentes.

Para estos ejecutivos, la seguridad en sus viajes, puntualidad y sanidad, son prioridad número uno. Un estudio sobre conductas, movimientos y transmisión de enfermedades respiratorias durante los vuelos, arrojó información concreta, y pudo documentarse, resultados que difieren de algunas recomendaciones generadas por la autoridad sanitaria.

Según el estudio publicado por la revista Proceedings of de National Academy of Sciences (PNAS por sus siglas) sobre 1541 pasajeros y 41 tripulantes, se recolectaron 229 muestras de laboratorio en aire y superficies y la principal vía de contagio de enfermedades respiratorias tuvo relación directa con las gotitas producidas al estornudar o toser, en tantoque muestras tomadas en hebillas de cinturones de seguridad y manija de lavabos, contrariamente al la creencia de ser considerado uno de los puntos de mayor contagio, presentaron resultados negativos a 18 virus respiratorios comunes, especialmente al SARS (síndrome respiratorio agudo severo).

Método de recopilación de datos

Estudios anteriores utilizaron diferentes tecnologías: cámaras de seguridad o sistemas de detección de ubicación, identificación por radiofrecuencia, ultrasonido o infrarojos, para cuantificar comportamientos. Sin embargo, su uso en un vuelo real no es posible.

Diez estudiantes graduados de enfermería de Emory University de Atlanta y salud pública integraron un equipo de recolección de datos mediante tabletas, con un software especialmente diseñado. En total, se realizaron diez viajes dentro de Estados Unidos, en aviones Boeing 757, de los cuales 8 eran en temporada de influenza (octubre a marzo).

Luego, los investigadores utilizaron los datos recolectados, como cantidad de veces que se abandonaban los asientos, el contacto con miembros de la tripulación, tiempo promedio en los lavabos y apertura de compartimientos, entre los más importantes, para construir modelos de simulación de una red de contactos y la relación con la propagación de enfermedades dentro de ese conjunto de personas.

Hallazgos

Pasajeros con una distancia de un metro (una fila o dos asientos laterales) del portador infeccioso, tienen el doble de probabilidad de contagio, de aquellos a más de un metro. La simulación se realizó con un mapa de calor y difiere de las recomendaciones de agencias de salud pública, quienes han manifestado el peligro para los pasajeros ubicados en un perímetro de dos asientos alrededor del portador de enfermedad.

Miembros de la tripulación y puntos de contacto tipo el pasillo del avión, facilitan una rápida propagación de enfermedades infecciosas, mientras pasajeros sentados en ventanas o se levantaron de sus asientos durante el vuelo, tienen menos probabilidades de contagio.

Un miembro de la tripulación infectado, contagiará a 4.6 pasajeros por vuelo, dado su nivel de exposición con las personas. Por este motivo, la recomendación a asistentes de vuelo es no viajar si están enfermos.

Estos resultados aplican en vuelos domésticos y se advierte una variación en rutas internacionales, de larga duración e incluso de otras aerolíneas, pues los viajes de corto alcance tienen menor movimiento y punto de contacto.

Como conclusión, la probabilidad de contagiarse una enfermedad en un avión, se relaciona con la red de contactos, es decir, aquellos lugares más concurridos por personas. Por el contrario, mientras menos contacto, menor probabilidad de contagio, como lo son los asientos ubicados del lado de las ventanas o primera y última fila o solo con evitar pararse durante un vuelo.

SaludAviónEstudio